El poder de las palabras y las historias
A los humanos nos gusta escuchar historias de humanos. Historias de la vida, que nos hagan sentirnos acompañados, con las que nos podamos identificar.
Una idea que vuelve repetidamente: Las historias emocionan mas que las marcas, más que las ideas, más que las imágenes. Emocionan y por lo tanto enganchan, nos hacen identificarnos, se sienten cercanas, humanas.
Hemos llegado a la conclusión de que las personas no somos capaces de prestar atención, que sólo podemos fijarnos en unas imágenes o en 140 caracteres. No creo que sea así. Un buen libro, una buena historia, un buen guión siguen haciendo que te quedes pegado a él.
Lo que pasa no es que no sepamos prestar atención más allá de ese contenido. Simplemente es que la parte interesante de la mayor parte de historias que contamos y nos cuentan cabe en 20 segundos o en 140 caracteres. Y aún metemos dos o tres hashtags, un enlace y sobran una docena.
Quizás desde el paradigma de que esperamos y disfrutamos las buenas historias se consigue crear contenido más interesante, más cercano, más humano. Y ¿Por qué no probar?
Un par de casos de historias creadas desde ese punto de vista:
- Un video sobre una historia… conocido pero merece la pena volverse a ver.
- Story Worldwide, una agencia que se dedica a crear historias
- Este video de Jay-OCallahan, The power of storytelling no me gusta especialmente pero aún así creo que hay mucho que aprender en él